La caprichosa forma de las nubes...

Manu no era ni de números, ni de letras… sino de momentos… ni de nubes o rocas, ni de amigos o amigas sino de personas… y sobremesas, sólo que ahora le tocaba vivir episodios algo despoblados y tenía el maravilloso ejercicio de acompañarse… porque a Manuela, la vida se lo había resuelto casi todo hasta que sintió que la soledad tenía eco… eco, eeeco, eeeeeco, eeeeeco…

Como nada pasa por casualidad, se cruzó aquel taller, aquel viaje sola, el pretexto perfecto para no colgarse una mochila en versión “llanero solitario” sino con sentido… ¿para ella o para los demás?… en el fondo, no dejaba de ser una excusa para retarse a ella misma y casi cerrando los ojos y alargando su brazo hacia el teclado pulso el click de COMPRA, el billete de avión ya se había agendado en su tarjeta de crédito!

Sintió el impulso de escribir y no tenía ni bolígrafo, ni su manoseado bloc de notas…

Grrrrrrrrr…  justo ahora que todo parece fluir desde el trastero de mis palabras tanto tiempo aletargadas… qué rabia! Detrás llevo vida, una nena que celebra cada sensación... quiero concentrarme y no puedo, su madre la reprende porque habla alto pero es el volumen en el que vive... golpea incansablemente la mesilla que se sostiene tras mi respaldo y sus padres no se dan ni cuenta... hablan, incansablemente también, y de cuando en cuando repiten la lengua de trapo de su pequeña... quiero dormir pero no puedo... me como una galleta, bueno “cookie”… me sabe bien esa palabra, e imagino una fotografía, qué ganas tengo de disparar... quisiera decirles algo pero es una familia que sonríe, cómo se le dice educadamente a una carcajada que me gusta su sonido pero que empatice con las demás sonrisas, incluso con las más silenciosas... las sonrisas como las nubes son caprichosas... 

Me siento bien... tranquila... contenta con mi compañía... abrí la bolsita de los cacahuetes sin usar los dientes, BINGO! Ojeo una revista y BINGO, estoy leyendo... la peque acaba de gritar un “Papá te quiero”... me ganó su espontaneidad, ya no me distrae... leo ENTRE DOS MUNDOS con texto de Carmen Cruz e ilustraciones de Willy Ollero, la historia de la guitarra que Paco de Lucía ideó pero que nunca llegó a tocar y ahora viaja de España a América para sonar (el corrector me corrige sonar por soñar... yo sonrío como las nubes, caprichosa... porque estoy en ellas, vuelo, viajo sola...). Recuerdo ahora todos esos ratos que El Irlandés me enseñó a disfrutar de grandes documentales... el de Paco de Lucía me cautivó, ENTRE DOS AGUAS... me enamoró, tal cual... tengo las manos saladas de los maníes o manises, dudo... por eso me recuerdan a ti, mi pasado, la palabra y las dudas... pero el cristal del iPhone no se engrasa, hoy mi bolígrafo descansa en la maleta de cabina y no voy a hacer levantarse a toda la fila, viajo asomada al mundo, quizá llegue hasta morena... qué linda la luz, qué bien le sienta a mi piel... me abrazo a su temperatura... la mamá canta ahora "quisiera ser tan alta como la luna..." como Mamá me cantara a mí, como yo a mi niña... suspiro... ahora un grito "para!!!!"... así somos las mamás... de la dulzura al estruendo pero sonrío porque todo fluye... escribo en voz alta, pienso en ese video ESCRIBE de Mariuca García-Lomas, que ni imagina lo que ha conseguido con su voz... “permitirse ser mediocre en pos de que exista”… gracias! La guitarra de Paco de Lucía "viaja sola" como yo... este texto sobre la que ahora se llama LA MAESTRO... me tiene electrizada! Necesito compartirlo… casi tanto como un abrazo!

Frases como "cazadores de miradas"... se cruzan o me encuentran, no lo sé…  "compra tiempo"... "mide la vida en experiencias"... incluso una ruta "el camino de los siete lagos en Argentina"... "en busca de la esencia, en inglés FOLLOW YOUR NOSE" (los artesanos de Grasse en la Costa Azul que desarrollan el olfato desde temprana edad... es la capital del perfume... visitas guiadas por 6€ todas las mañanas de los martes desde agosto a octubre... me fugaría ahora contigo prima... me late así… dejémoslo en una pendiente fuga)... no oigo a la peque... el papi duerme, hay una tableta con dibujitos... sigo con las frases "porque sólo se vive una vez" (gracias socio por recordármelo ayer, sé que te gusta el anonimato, gracias a tu rubia por disparar las alarmas... me encantaría haceros un reportaje de familia con otras tabletas aquí en Fuerteventura cabalgando las olas)... "proyectos con alma"... y así avanza mi retina por este magazine... y mis yemas midiendo el pulso al corazón.

Y así iba saltando Manu renglones como de niña en su mundo-al-revés las rocas… recolectando estrellas, todas las que se caían del cielo…  por eso debían de llamarlas “estrellas de mar”… los mayores no tenían ni idea!

Afuera continúan las nubes y la sonrisa de Manu puesta... algo caprichosa!